Ya comentamos las anécdotas del viaje, como si fuera parte de nuestro pasado, nos despedimos de los amigos granadinos que conocimos en la última parte del viaje, y también de Alex y de Marta que han estado con nosotros desde el primer día.
Por la mañana vemos amanecer en el autobus que nos lleva al aeropuerto a las 6 de la mañana, con sueño facturamos las maletas, y tomamos un café ya en la zona de embarque.
Un simpático Papá Noel viene a despedirnos, para recordarnos que en España sigue la Navidad, y que llegaremos a tiempo de comer las uvas con la familia y empezar el año contando nuestras aventuras a los amigos.
Egipto, sin lugar a duda, ha merecido la pena, y aunque volvemos siendo más pobres, sus paisajes y sus gentes son ya parte de nuestra riqueza cultural.
Por la mañana vemos amanecer en el autobus que nos lleva al aeropuerto a las 6 de la mañana, con sueño facturamos las maletas, y tomamos un café ya en la zona de embarque.
Un simpático Papá Noel viene a despedirnos, para recordarnos que en España sigue la Navidad, y que llegaremos a tiempo de comer las uvas con la familia y empezar el año contando nuestras aventuras a los amigos.
Egipto, sin lugar a duda, ha merecido la pena, y aunque volvemos siendo más pobres, sus paisajes y sus gentes son ya parte de nuestra riqueza cultural.
Familia, me ha encantado seguir vuestro viaje a través de vuestras crónicas en el blog. Vamos, que es como si me hubiese asomado a vuestro recorrido por una pequeña abertura hecha de imágenes y palabras, y a través de ella, haber podido compartir este precioso viaje con vosotros.
ResponderEliminarNo puedo dejar de deciros lo mucho que me ha alegrado ver a Saul y Luna, sobre todo, porque les veo muy bien y disfrutando de una experiencia única con unos padres estupendos... Ya apuntábais maneras en la escuela, los papás, y los niños.
Viéndoos ahora, solo me queda felicitaros y desear que sigáis disfrutando juntos de todas las experiencias que viváis y de todos los sueños que imaginéis.
Un beso muy fuerte familia.
Adela.